Santi Ravier es creador de contenido, influencer y cuenta con más de un millón de seguidores en Tik Tok. Un tiktoker que acostumbró a sus seguidores a realizar videos junto a su familia, sobre todo con su abuela Mariella, que suelen ser los más demandados y también con su papá. El joven tiene 21 años y a la par de su contenido en redes, es estudiante de Nutrición.
El influencer ha conquistado al público de Tik Tok mediante sus vídeos cotidianos y caseros. Ravier suele mostrar y resaltar acciones cotidianas de su vida y ahí es el momento donde lo fusiona con las apariciones de su familia. Incluso la mayoría de sus videos están relacionados con la comida y el creador de contenido suele probar distintos tipos de alimentos.
El creador de contenido reveló que tan solo le queda un año de carrera pero no sabe bien como le deparará su futuro. En esa incógnita, las redes sociales también juegan un papel crucial porque sabe que en los últimos años escaló con miles de seguidores y superó la barrera del millón. Asimismo, el joven de 21 años afirmó que en un futuro no se ve “laburando de eso” (nutrición).
Opiniones, comida y carrera
Insertado en el mundo de las redes hace unos años, Ravier conoce el ida y vuelta que hay con el público y entiende que algún comentario negativo puede surgir. Durante un tiempo, el influencer ha recibido críticas sobre su contenido relacionado con la comida y con su cuerpo, aunque el joven aclaró que por lo que más lo critican es “por su cuerpo”.
Estudiante de nutrición y ya encaminado en su último año, a Santiago le gusta la carrera pero no se visualiza en un hospital o en un consultorio como nutricionista clásico. El tiktoker especificó que le gustaría estar centrado en la industria de alimentos. Si bien la carrera la eligió por cuenta propia y porque tenía el chip de terminar la secundaria y estudiar una carrera universitaria, admite que no le resulta complicado estudiar y que el conocimiento “suma.”
Ravier tiene la certeza de que las redes son lo suyo y que el conocimiento de nutrición podría servirle en un futuro para meterse en la industria. En el ámbito tecnológico, lidia con los haters y hubo un tiempo que algunos usuarios “llegaron a decirle cosas muy feas”.
La cuarentena, el inicio de Ravier
La pandemia del coronavirus, desatada en 2020 a nivel mundial, generó un confinamiento masivo en todo el mundo. En Argentina, el encierro duró varios meses y muchos creadores de contenido, influencers, streamers y tiktokers aprovecharon para generar contenido mientras el mundo estaba en pleno contexto de incertidumbre total.
Uno de los que emergió fue Ravier, que todavía estaba en la secundaria y dijo que subía entre “seis o siete videos por día” porque tenía muchas ganas de irrumpir en las redes. Cada influencer o creador que arranca en las redes, tiene un objetivo y un trasfondo diferente. El de Santiago, desde un inicio, era obtener más respuestas en sus “historias de Instagram”. Cinco años después, tiene más de un millón de seguidores en Tik Tok y superó la barrera de los 200.000 en IG.
El ida y vuelta con el público, su abuela y otros rubros
Cuando un tiktoker comienza a tener relevancia en redes, suele ser contactado por varios programas de stream o realities para ponerse a prueba en diferentes ámbitos. Ravier no fue la excepción y afirmó que lo llamaron de streamings o realities muy grosos en Argentina, pero no tuvo intenciones de hacerlo por la “incertidumbre”. Incluso, recordó una vez que fue a una radio y estuvo incómodo.
La abuela, un personaje frecuente en los videos de Santiago, comenzó siendo como un chiste y se volvió un actor esencial en sus videos. El joven de 21 años dijo que no le molesta a su abuela salir en los videos y que lo que busca es la interacción y el ida y vuelta con el público.
El creador de contenido comentó en una entrevista con un medio importante de Argentina que el contenido en redes tuvo sus momentos. Dejó y retomó la suba de videos varias veces y en el medio sufrió mucha ansiedad. También expresó que arrancó con terapia.
La vida de Santi Ravier, como se lo conoce en redes, tuvo picos, con subidas y bajadas pero siempre con la misma tonalidad. Videos con su sello propio, con su padre, su abuela y el tema de la comida y las degustaciones con tonos humorísticos. Sus grabaciones se caracterizan por ser cotidianas, rutinarias y le agrega esa cuota graciosa.
En las redes recibe mucho cariño, con una estrategia de dos videos por día, una comunidad que lo apoya y una inspiración que surge desde un supermercado hasta cosas en la calle. Y es eso, un joven de 21 años que anhela con terminar la carrera y seguir creciendo en redes.
