Luis Miranda Espinoza se ríe con ellos, no de ellos. ¿Qué quiere decir esto? El comediante, nacido en Vicuña, Chile en 1995, tiene una parálisis cerebral, conocida como tetraparesia, que le afecta el 70% de su condición física. El chileno hace shows de stand up y revoluciona a su público mediante chistes sobre su condición y la interacción con el público, con algunos que también tienen discapacidades físicas.
Miranda Espinoza ha logrado convertir a su condición física en su mejor repertorio arriba del escenario. El chileno, cuando nació, estuvo ocho minutos sin oxígeno y eso le afectó sus cuatro extremidades. Tiene dificultad para desplazarse y rigidez en sus manos. El comediante padeció una asfixia nasal y sufrió el doble de tiempo de daño cerebral.
A pesar de su discapacidad, el joven que estudió contaduría nunca dudó de su talento y aprovechó su humor provocativo e irónico para conquistar al público. En septiembre del 2025, tiene más de 2.3 millones de seguidores en Tik Tok y sus dos videos más virales fueron con personas que comentaron sus discapacidades y dejaron un mensaje muy bonito.
A los shows de Miranda Espinoza suelen acudir personas con discapacidad y revelan sus condiciones. El comediante juega e interactúa con ellos y mete algunos chistes en medio de la historia para “reírse con ellos y no de ellos”. Sus shows han sido tan exitosos en Chile que en 2024 se presentó en el Festival de Viña del Mar y obtuvo dos premios, además de que culminó el año con su primer show en Argentina, la primera actuación fuera de su país.
Su infancia y la vida universitaria
Los recuerdos de Miranda Espinoza en cuanto a su infancia no son los mejores, más que nada porque manifestó que vivía en una “burbuja”, que no podía hacer muchas cosas y que todavía no se había aceptado. Recuerda también que siempre en su grupo de amigos hubo chistes y bromas sobre su condición pero que nunca fueron con mala intención. Desde pequeño ingresó en La Teletón, una institución abocada a la rehabilitación de niños con discapacidades en Chile.
La vida universitaria fue distinta. Estudió para ser contador, terminó la carrera y ofició en la profesión por algunos años. Luis, durante su vida académica en el colegio, siempre se lució con buenas notas y la facultad no fue un impedimento. El punto de quiebre fue la pandemia de coronavirus, como sucedió con tantos otros comediantes o creadores de contenido que se lanzaron en busca de su sueño.
En este caso, el nacido en Vicuña sabía que lo suyo era la comedia, y así empezó, con videos irónicos y particulares de su condición. El chileno reveló varias anécdotas diarias de su vida y las comentó en modo humorístico mediante las redes. Los chistes cautivaron rápido al público, sobre todo a distintas familias o personas que tenían algún pariente con discapacidad y que le agradecieron por encarar el tema desde un lado humorístico.
Desde el 2020 en adelante, alcanzó niveles altísimos de popularidad. Una de esas razones fue su participación en el Got Talent de Chile en 2021, donde quedó en segundo lugar y después participó del Festival de Viña del Mar, uno de los eventos más grandes del país y donde varios medios enfocaron sus letras en el “nuevo comediante”. También se unió a otros eventos con diferentes comediantes, protagonizó un podcast con uno de ellos.
La discapacidad como tema normal, un enfoque imprescindible para Miranda Espinoza
“Yo al hablar de discapacidad en mis shows, trato de normalizar la discapacidad, que no sea algo tabú, que no sea algo que a uno le dé pena, que a uno le dé lástima porque esa es una visión mala” resumió el comediante, que busca generar la risa y sobre todo ese “mensaje” de normalizar la discapacidad.
También habló acerca de lo que más le molesta sobre la discapacidad: “Creo que lo que más me molesta es que me sigan tratando como niño. Hay una infantilización de la discapacidad” y agregó que lo que más teme es que la gente “vaya a su show para aprender de inclusión”. Luis Miranda Espinoza es comediante y eso lo tiene claro, y por más que tenga una discapacidad, entiende que es igual a los demás.
¿Cómo se define Luis Miranda Espinoza? “La probabilidad de sufrir asfixia es muy baja. Sólo el 0,2%. Y la probabilidad de sufrir asfixia y ser chistoso, es aún más baja. Yo estoy en extinción y no lo sabía” comentó. Es cierto que su asfixia nasal por ocho minutos no es común y ha sufrido el doble de daño en su cerebro.
La rompe en Chile, la rompió en Argentina y se consagró en el Festival de Viña del Mar, un evento al que acudió muy emocionado porque sintió que cumplió un sueño. Luis Miranda Espinoza , desde que dejó la contaduría, se soltó y está viviendo su mejor momento.
