César Gueikian

Gibson. Esa es la palabra central que relaciona a César Gueikian con el mundo de las guitarras y una de las empresas más emblemáticas del instrumento. Un hombre argentino y proveniente de una familia armenia que se crió escuchando a sus ídolos más grandes y actualmente lidera una de las compañías de fabricación de guitarras más icónicas fundada en 1894.

La llegada de Gueikian a Gibson es tan fascinante como particular. Una historia que superó una crisis financiera, una bancarrota, una empresa de por medio que compró varias deudas, una reestructuración y una modificación 180° de una de las empresas de guitarras más importantes del mundo. Actualmente Gueikian es CEO, maneja más de 2000 personas y ha lanzado distintos programas de Gibson.

El argentino-armenio dejó en claro que el foco central es la guitarra. Pueden existir miles de cambios y modificaciones, pero el producto central es la guitarra en todos sus formatos y versiones. Cuenta con una colección que involucra más de 170 guitarras y algunas de ellas son modelos “Gibson” de los años 50/60. 

¿Por qué la historia de César Gueikian y Gibson se volvió tan popular?

El relato tiene su cuota especial porque César Gueikian se crió escuchando a los guitarristas más famosos que portaron en algún momento una “Gibson”, un punto inicial que destaca la llegada de un músico que transformó la empresa y la  relanzó en el mercado.

El argentino-armenio se crió en Vicente López, un barrio de CABA. Se formó en Estados Unidos, donde compró su primera guitarra eléctrica Gibson, hizo una Maestría en Administración de Empresas y gran parte de su vida profesional se dedicó a sanear y respaldar empresas en situaciones financieras complicadas. En 2013 creó su propia empresa denominada “Melody Capital Partners”, y ese mismo año  compró la primera deuda de Gibson.

La empresa de guitarras comenzó a invertir inadecuadamente y durante tres años, mientras la compañía y las submarcas perdían dinero, la empresa de Gueikian se encargaba de comprar deuda, hasta que en 2018 asumieron el 100% de la deuda. Ese año fue un punto de quiebre en su vida. De anhelar tener guitarras Gibson y comprar más de 80, a tener que reestructurar la empresa para que no sufra una quiebra definitiva.

La estrategia de Gueikian: la guitarra como producto estrella

Cuando la empresa del argentino-armenio quedó con el 100% de la deuda de Gibson, tenían que poner en marcha sus conocimientos y objetivos para el renacer de la compañía de guitarras. ¿Qué hicieron? Descartaron la inversiones externas y se enfocaron nuevamente en el producto estrella. ¿Cómo lo hicieron? Lanzaron al mercado la colección original de las guitarras y la colección moderna.

Luego de esos movimientos, en una entrevista, César recordó que “llamaron a los artistas” y luego los “artistas se comunicaron con ellos”. En el presente los números y las estadísticas avalan el cambio de rumbo del CEO. Casi seis años después del duro desafío, en la fábrica de Gibson en Nashville se producen más de 350 guitarras al día y hay miles de pedidos con anticipación.

Las guitarras más caras oscilan entre los 80.000 y 100.000 dólares y hay pedidos de venta de hasta dos años de anticipación. El administrador de empresas también ofrece distintos servicios de Gibson, como “Gibson Records” o “Gibson TV”, aunque el argentino-armenio aclaró que “se enfoca todo en base a la guitarra”. Son distintos programas que ofrecen música hecha con el instrumento.

En cuanto al futuro, Gueikian remarcó que “la industria crece un 5% por año” y que “el instrumento está creciendo en distintos géneros”. Esta frase está sujeta a unas declaraciones del CEO donde destaca que la música digital y electrónica en la actualidad involucran muchas guitarras.

El objetivo de Gueikian con Gibson

“Instrumento, sonido y media”, los tres ejes que resaltó César Gueikian para la empresa de guitarras. También subrayó la importancia de “Gibson Garages”, espacios donde el público puede experimentar el uso de guitarras prestigiosas y foguearse de sus artistas más conocidos. El fin del argentino- armenio es que las personas se “sientas cómodas” y puedan utilizar el instrumento sin problema.

Una especie de relación directa donde el CEO controla la experiencia completa de los consumidores mientras estos disfrutan de su vivencia en los espacios de la empresa. 

El trabajo de César Gueikian al frente de Gibson como CEO atraviesa un momento de crecimiento absoluto, sin antes haber pasado por un rescate en primera persona donde detectó una “oportunidad”. Esta visión que tuvo el nacido en Viucente López fue impulsada por sus estudios y su trabajo de invertir en empresas para mejorar o reconstruir su rendimiento.

En ese lapso donde Gibson no pasó sus mejores años, y donde la empresa del administrador asumió el 100% de la deuda, comenzó una historia que surgió desde muy temprana edad con Gueikian y su pasión con las guitarras, hasta tener una colección de casi 200 guitarras, y con la mitad de origen Gibson.